Se puede ver que los orígenes de las muñecas Suruga Hina Ningyo se remontan a simples muñecas de arcilla conocidas como neri-tenjin. Tenjin es otro nombre para Sugawara Michizane, una académica de la época Heian (794-1185), que fue respetada como diosa del aprendizaje. Pero la artesanía en sí comenzó cuando un hombre local llamado Aono Kasaku reunió a su alrededor personas expertas en trabajos con arcilla y comenzó a hacer muñecas. Más tarde, se hicieron las tenjin, que estaban vestidas, y todavía existen ejemplos de ellas que datan de 1853.
A fines del periodo Edo, en 1868, se produjeron muñecas vestidas de un modo más elaborado conocidas como ishogi-tenjin.

La individualidad de cada fabricante de muñecas se ve en la elección del color y el patrón de la tela, así como en la fabricación del cuerpo. Sin embargo, estas idiosincrasias están aún más marcadas en la disposición de las posturas. Esto se conoce como el udeori o furitsuke. Es el último proceso en la fabricación de una muñeca y es tan importante que incluso si se pusieran cien muñecas en línea un experto podría distinguir de un vistazo qué muñeca fue hecha por cada fabricante. Se hace una amplia selección de muñecas, incluidas las de Hina Matsuri o las del festival de muñecas. Otras incluyen figuras del pasado, así como una forma contemporánea de la muñeca neri-tenjin.