Fue la plantación de árboles de laca promovida por una familia local durante el período Muromachi (1392-1573) lo que llevó a la fabricación de Aizu Nuri. Luego, cuando Gamo Ujisato, que nació en lo que hoy en día es la prefectura de Shiga, llegó a liderar el clan Aizu en el período Momoyama (1573-1600), trajo profesionales del lacado talentosos a esta región del norte desde Shiga. Sus habilidades fueron difundidas y como la región promovió el desarrollo de técnicas en artesanías usando el laqueado, Aizu muy pronto se convirtió en el centro de producción de todo tipo de vajillas laqueadas.
Más tarde, decoradores maki-e especializados fueron traídos desde Kioto y el desarrollo constante de la artesanía del laqueado aquí tuvo como resultado la concesión de un permiso especial del Shogunate para exportar Aizu Nuri a mediados del período Edo (1600-1868). La producción se resintió durante el período inestable de la Restauración Meiji en 1868 pero muy pronto volvió el trabajo a la normalidad y fue entonces su edad de oro.

Las varias técnicas usadas y las decoraciones usando motivos auspiciosos favorecidos por los japoneses son parte del encanto de Aizu Nuri. Varias técnicas tienen una nota particular. Una llamada tetsusabi-nuri es decorada con motivos agradables dibujados en marrón oxidado. Luego hay la técnica kinmushikui-nuri que luce un diseño conseguido al espolvorear cascarilla de arroz encima de la superficie mojada de una pieza. Con la técnica kijiro-nuri la belleza se consigue con las vetas de la carcasa de madera que se dejan ver. Cada técnica se ha utilizado de manera inteligente en la fabricación de boles, cajas apilables tradicionales, posavasos y bandejas.