Los accesorios para el festival Hina Matsuri o el festival de las muñecas ya se producían en Suruga en el siglo XVI cuando Imagawa era señor feudal de esta provincia, que corresponde a la actual prefectura de Shizuoka. Con la construcción del santuario Kunosan Toshogu y el santuario Asama, se introdujeron muchas técnicas artesanales avanzadas que provenían de todo el país y se desarrolló la producción de accesorios Hina como parte de la industria de las lacas que, al beneficiarse del clima cálido y húmedo de la zona, pasó a establecerse durante el periodo Edo (1600-1868).
Otra ventaja fue estar ubicado entre los principales centros de Edo (Tokio) y Kioto, lo que impulsó el crecimiento de esta artesanía. Todos los procesos necesarios se asignan a personas cualificadas como torneros de madera, barnizadores, decoradores de laca de oro y plata maki-e o aquellos que hacen accesorios, y es posible producir una gran cantidad de artículos a pesar de que todos están hechos a mano.

Gran parte del trabajo de decoración se compone de motivos arabescos con hojas e imágenes brillantes de la naturaleza, hechos como adornos lacados en oro y de plata maki-e. Todos se hacen con gran precisión, incluso los detalles más finos de tornería y ebanistería. Por ejemplo, una caja de agujas lo suficientemente pequeña como para ponerla en la palma de la mano tiene hasta cajones que funcionan.